“Diseñan una bacteria capaz de detectar el ADN tumoral”, es el impactante titular que las revistas científicas comparten alrededor del mundo. Se trata de un descubrimiento biotecnológico que podría salvar la vida de muchas personas y que, sin duda, es un paso gigante en materia de avances de salud.
Se plantea el diseño de una bacteria que detecta el ADN tumoral presente en el organismo
Aunque pareciera un titular sacado de una película de ciencia ficción, en realidad se trata de una bacteria diseñada por científicos que es capaz de detectar el ADN tumoral presente en el torrente sanguíneo.
Las células tumorales presentes en el torrente sanguíneo suelen liberar un material genético que se considera una especie de marcador o ADN tumoral circulante, el cual es posible detectar a través de diferentes pruebas.
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Este ADN tumoral presenta distintas variaciones que permiten identificar ciertas características e información valiosa acerca de dicho tumor en el organismo de las personas.
Una de las pruebas que se realiza para detectar y estudiar el ADN tumoral es la biopsia líquida, dónde se toman muestras de fluidos corporales para ser examinadas. Sin embargo, para ello es necesario extraer sangre, por ejemplo, y estudiarla en un laboratorio.
En cambio, imagina el hecho de poder diseñar una bacteria en un laboratorio que tenga como principal trabajo no infectar al huésped, sino captar el ADN que liberan las células tumorales y proporcionarnos toda la información necesaria respecto a un tumor.
Entonces, sería posible insertar esta bacteria en el organismo de una persona para que desempeñara un papel como biosensor, de manera que posteriormente pudiera ser detectable y ubicable para extraerla y efectuar un diagnóstico oportuno respecto al tumor, antes de que este pudiera generar daños irreparables en la persona que lo padece.
Gracias a la combinación de la biología, la ingeniería y la informática, es posible concebir a la biología sintética, una rama de la ciencia que pretende diseñar construir y modificar sistemas biológicos con la meta de que puedan desempeñar nuevas funciones en pro del beneficio de los seres humanos.
En la actualidad, algunos microorganismos han sido modificados para producir biocombustible, material químico, detectar contaminantes, corregir mutaciones e incluso sintetizar medicamentos, situaciones que han impulsado a los científicos a diseñar microorganismos que funcionen como biosensores celulares tanto para detectar como para responder y solventar condiciones o enfermedades particulares del ser humano.
Hasta la fecha, el diseño de un microorganismo capaz de funcionar como un biosensor para la detección de secuencias de ADN extracelular tumorales era más un sueño que una realidad; sin embargo, un grupo de investigadores ha contactado a la revista Science para informarles del diseño y la modificación de una bacteria capaz de realizar estas funciones en vivo.
Los científicos han utilizado como caparazón al acinetobacter bylyi, una bacteria de tipo Gram negativa que dentro de sus funciones naturales posee la capacidad de captar e introducir en su interior material de ADN extracelular, efectuando para ello una transformación de dicho material genético, potencialmente aprovechable para los fines de la investigación.
De forma práctica, este descubrimiento y su posterior aplicación en el futuro podría ayudar a las personas a realizar una detección temprana y oportuna de material tumoral, evitando que las patologías derivadas de ello lleguen a estadios irreversibles o terminales que acaben con la vida del paciente.
Esto no solo ofrecería una esperanza de sobrevida superior para los pacientes sino que además significaría un paso en la dirección correcta respecto a la lucha contra el cáncer y otras patologías similares.
Sin embargo, aún queda camino por recorrer entre el diseño y la posibilidad de uso efectivo de esta bacteria, pero se trata de la apertura de una puerta a un futuro prometedor en materia de salud.